La cooperativa de iniciativa social 2avia ha celebrado su X aniversario en octubre, mes de la salud mental. Isabel, una de sus socias, nos cuenta cómo se constituyeron cómo entidad especializada en acompañamiento terapéutico y en qué consiste su labor.

2avia (nombre de inspiración brasileña que significa «dos en la calle») comenzó su andadura mucho antes de constituirse como cooperativa. Isabel nos los cuenta: «Nos constituimos como asociación de acompañantes terapéuticos en 1999. Todo surgió a partir de una serie de cursos de formación en acompañamiento terapéutico del Servicio Aragonés de Salud en los que coincidimos, aunque yo entré a formar parte de la asociación un poco más tarde».

Las profesionales de 2avia provienen de distintos ámbitos de la salud, pero todas tienen en común que poseen formación en acompañamiento terapéutico. Isabel nos explica en qué consiste exactamente esta práctica:

«El acompañamiento terapéutico (AT) propone que la principal herramienta de trabajo con personas que sufren alguna enfermedad mental sea el vínculo terapéutico. El AT es una técnica complementaria en el abordaje de la salud mental, realiza su labor fuera de la consulta, en la vida cotidiana de las personas, ya sea en el domicilio, en el barrio o en situaciones de crisis. Nosotras lo que hacemos es estar ahí acompañando, entrar en su mundo y respetarlo, para averiguar qué quieren, qué sienten, qué les interesa, qué pueden aportar, cómo les podemos acompañar para hacer lo que necesitan y para sentirse mejor… Y todo esto a veces implica estar mucho a la espera. Es muy común que las personas con enfermedad mental de entrada no tengan ganas de hacer nada e incluso nos ignoren.»

 

Nosotras lo que hacemos es estar ahí acompañando, entrar en su mundo y respetarlo, para averiguar qué quieren, qué sienten, qué les interesa, qué pueden aportar, cómo les podemos acompañar para hacer lo que necesitan y para sentirse mejor…

El acompañamiento terapéutico propone que la principal herramienta de trabajo con personas que sufren alguna enfermedad mental sea el vínculo terapéutico

el problema principal que marca ese rechazo es el miedo a la locura que todo el mundo tenemos

A la pregunta sobre si el rechazo a la enfermedad mental por parte de la sociedad es aún muy grande, Isabel tiene muy clara su respuesta: «Sí, el problema principal que marca ese rechazo es el miedo a la locura que todo el mundo tenemos. Comenzando por el miedo a nuestra propia locura, pero que se proyecta en el otro. Tendemos a separar el “ellos” y “nosotros”: “ellos”, que están locos, que tienen una enfermedad, y “nosotros”, que estamos bien, que somos “normales”. Pero a lo largo de todos estos años de trabajo he aprendido que esa frontera no existe. En unas condiciones que fueran los suficientemente desagradables y traumáticas, todas acabaríamos volviéndonos locas».

Esta estigmatización de la locura viene marcada también, según nos cuenta Isabel, porque ha habido un gran desarrollo de la farmacología que permite muchas veces mitigar el sufrimiento y apaciguar síntomas que realmente hacen sufrir mucho a las personas con trastornos mentales, pero que ha derivado en que se use el modelo biomédico para explicar todos los problemas.

«Las farmacéuticas tienen mucho poder, lo médico tiene mucho poder, y a las personas que sufren les alivia en cierto modo que le pongan un nombre a las cosas que le ocurren, les tranquiliza que les digan que tienen una enfermedad, sobre todo también a los familiares.»

Charlando con Isabel hablamos de que también es común que en la sociedad sin diagnóstico se produzca el otro extremo, el rechazo absoluto a cualquier tipo de farmacología en una situación puntual, como fruto del miedo a cruzar esa frontera ficticia del «ellos y nosotros», a pasar a formar parte del ellos. «No se trata de tirar la medicación a la basura completamente, sino que debemos manejar un concepto de salud más amplio. Podría haber un equilibrio entre lo que puede aportarnos la farmacología y la construcción social, pero la farmacología y lo biomédico tienen mucho peso, mientras que lo psicosocial no está gestionado directamente desde el Salud, sino por grandes fundaciones o pequeñas cooperativas como nosotras. Si la salud mental es la hermanita fea de la salud, la salud mental comunitaria, o lo que otros llaman rehabilitación psicosocial –aunque a ellas no les gusta usar ese concepto–, es la hermanita fea de la salud mental. Se trata como algo anecdótico y, por tanto, en esta época de crisis, es en lo primero que han recortado presupuestos, número de profesionales, salarios… Por un lado, dicen que es muy importante lo psicológico y lo social, que tengan apoyo en su vida cotidiana, que se les acompañe…, pero al final lo que se considera realmente fundamental es que nunca se dejen de tomar la medicación.»

Son varios los problemas con los que 2aVia se ha ido encontrando a lo largo de su trayectoria. En primer lugar está el hecho de que «como sociedad somos analfabetos en salud mental, aunque ha habido grandes avances gracias a que se han hecho campañas que han ayudado…, pero seguimos teniendo mucho miedo a los trastornos mentales. Se sigue teniendo la percepción de que el cuerpo y la mente son dos cosas distintas y ajenas entre sí. Y hasta que no estamos muy mal, no le hacemos caso a la mente. La gente espera a llegar a un estado grave para solicitar ayuda. Por eso nosotras cada vez estamos trabajando más en sensibilización.»

A partir de esto, Isabel nos dice que la enfermedad mental es también un problema social. Para incluir a alguien en una comunidad, hay que conseguir que la comunidad sea inclusiva. Y quiere hacer un llamamiento a la sensibilidad social con el tema: «Muchas veces nos encontramos con personas que tienen mucha sensibilidad social, que son conscientes de muchas desigualdades que se dan en muchos ámbitos, pero para los que sin embargo el tema de la salud mental es algo completamente ajeno a ellos y no lo consideran en absoluto. No hay que olvidar que, por ejemplo, en los campamentos de refugiados está habiendo unos índices muy altos de brotes de psicosis.»

Otro problema al que se han enfrentado las profesionales de 2avia es la reducción de presupuesto por parte de la Administración a partir de la crisis económica, pero Isabel nos cuenta que han conseguido resolver ese obstáculo gracias a que, al pertenecer al ámbito de la salud comunitaria, están acostumbradas a trabajar en red y esa red las ha sostenido. Pero ser una pequeña cooperativa en un sector en el que predominan grandes fundaciones con grandes patronatos no es fácil. «Ha sido un reto para nosotras seguir ofreciendo, aun en tiempos de crisis, el tipo de servicio que queremos dar y a la vez mantener unas buenas condiciones laborales para las trabajadoras, incluidas nosotras. Creo que no lo hemos resuelto mal. No ha sido fácil, pero seguimos sintiéndonos bien con lo que hacemos y a la vez mantenemos unas condiciones laborales aceptables. Hacer dinámicas de grupo nos ha ayudado mucho a la hora de seguir cohesionadas y con fuerza.»

No hay que olvidar que, por ejemplo, en los campamentos de refugiados está habiendo unos índices muy altos de brotes de psicosis

Isabel, en la conferencia en la celebración del X aniversario como cooperativa: “Desenfermar la vida. Hacia una construcción colectiva de la salud mental”, de Sara Toledano

Ha sido un reto para nosotras seguir ofreciendo, aun en tiempos de crisis, el tipo de servicio que queremos dar y a la vez mantener unas buenas condiciones laborales para las trabajadoras, incluidas nosotras

o tenemos un equipo de personas que se cuiden entre ellas y que tengan unas condiciones laborales aceptables, o las trabajadoras no durarían mucho e incluso enfermarían

¿QUIÉNES FORMAN 2AVIA?

2avia son Isabel, Chabela, Mila y María, junto con Laura, Ana, Alejandra, María, Javi, Miriam y Sandra. Puedes contactar con ellos a través de su página web www.2avia.org o en los teléfonos 976 555989 / 618873118.

Le preguntamos por cómo llegaron a la economía social y solidaria, e Isabel nos explica que es algo que se dio desde el principio de forma natural y necesaria: «Incluso antes de ser cooperativa, éramos una asociación muy horizontal: todas tomábamos las decisiones, la presidencia era rotativa… Siempre hemos tenido muy claro que o cuidábamos las condiciones laborales o no aguantaríamos mucho. Trabajamos con un realidad dura, por lo que si no generamos un ambiente laboral en el que se esté a gusto, no sobreviviríamos como entidad. No sé cómo llegan otras entidades hasta la economía social y solidaria, pero en nuestro caso, o tenemos un equipo de personas que se cuiden entre ellas y que tengan unas condiciones laborales aceptables, o las trabajadoras no durarían mucho e incluso enfermarían.»

Al hablarnos sobre los proyectos que tienen ahora entre manos, Isabel nos cuenta que están trabajando mucho en el ámbito de la sensibilización y prevención. Y nos habla sobre un interesante proyecto que acaban de comenzar de detección de activos en salud, en concreto en salud mental, para la infancia de Torrero. Nos explica en qué consiste:«Está demostrado que, más que con factores biomédicos, la salud tiene mucho que ver con las condiciones socioeconómicas: con el rol de género y con un montón de factores que influyen tremendamente en los problemas de salud, pero no solo hay determinantes sociales en negativo, sino que hay factores protectores de a salud. La salutogénesis, que es un paradigma de salud positiva, afirma que las comunidades pueden ser creadoras de su propia salud y las personas que viven en una comunidad son las que mejor conocen los factores que protegen la salud. Nosotras en Torrero hemos comenzado ahora este proyecto y lo primero que queremos hacer es identificar los factores que protegen la salud mental de la infancia del barrio. Para eso estamos hablando con niñas y niños porque lo que más nos interesa es escuchar su voz. Y están colaborando con nosotras el CEIP Sáinz de Varanda, la Asociación de Tiempo Libre El Trébol y también el Centro de Salud y el Camino Escolar.»

 

Las principales actividades y servicios que 2avia ofrece en la actualidad son las siguientes:

  • Participan en los programas de pisos compartidos del Servicio Aragonés de Salud para personas con trastornos mentales como equipo de apoyo social comunitario desde el 2002. En estos pisos, dos o tres personas con trastornos mentales comparten vivienda y viven de forma independiente, bajo supervisión diaria o semanal.
  • Acompañamiento terapéutico a particulares.
  • También llevan a cabo programas de sensibilización: los más recientes han sido la exposición de fotografía «Desvaríos. Sueños imposibles», y el Ciclo de Cine y Locura de Aragón «Persona», organizado por 2avia con la colaboración de la Universidad de Zaragoza y Stop Estigma (grupo que surgió de 2avia y que actualmente mantiene un programa quincenal en Radio Topo que se llama «Antena Dislocada».)
  • Además ofrecen formación en acompañamiento terapéutico, pero también supervisión y formación de equipos de cualquier ámbito, no solo del ámbito de la salud mental, mediante técnicas de cohesión de equipos y resolución de conflictos.