La cooperativa de economía solidaria Tararaina impulsa este proyecto de innovación agroalimentaria y social para la recuperación del regaliz de palo y su transformación en un producto de gran valor añadido. Este miércoles lo han presentado en Pina de Ebro con la inauguración del obrador.

Depende de la edad que tengas quizás recuerdes el sabor del regaliz de palo. A lo mejor eres de las personas que han tenido la suerte de mordisquear esta golosina natural que se vendía en las calles, o que los niños y niñas recogían de las riberas del Ebro. Aragón era uno de los principales territorios productores de regaliz y también líder en su transformación. Sin embargo, el consumo y la producción se han ido perdiendo a pesar de ser un producto muy apreciado, con grandes propiedades y con muchos usos en diferentes industrias; desde la agroalimentaria a la farmacéutica o la cosmética.

«Hoy el consumo de regaliz de palo ha descendido de manera importante, entre otras cosas porque no sabemos cómo consumirlo, ni lo hemos incorporado a nuestros hábitos. Desde luego no lo encontrarás en los lineales del supermercado, ni podrás comprarlo en las tiendas de barrio con facilidad», explica la cooperativa de iniciativa social Tararaina. Esta entidad de REAS Aragón y MESCoop Aragón es impulsora de Ecoradiz, un proyecto de innovación agroalimentaria y social, pionero en la Ribera Baja del Ebro, que trabaja para la recuperación del regaliz de palo, con cultivo ecológico.

Este miércoles, en el Claustro del Antiguo Convento de San Salvador, Tararaina junto al Ayuntamiento de Pina de Ebro inauguraron oficialmente el obrador de Ecoradiz, en el que se transformará el regaliz de palo en polvo, viruta, taco o palitos para ser usado en cocina, también en medicina o infusiones. Además, se dará empleo a cuatro mujeres de la zona. Durante la jornada ofrecieron una visita guiada por las instalaciones, la explicación del proceso de transformación del producto y una degustación de productos exclusivos elaborados a base de regaliz. También contaron con la participación de representantes institucionales, entidades sociales colaboradoras y protagonistas del proyecto.

   Inauguración del obrador Ecoradiz | Foto: Tararaina 

Se trata de «una iniciativa innovadora y con un alto impacto social y medioambiental», aseguran en una nota de prensa. Ecoradiz «no solo recupera la elaboración artesanal del regaliz y su transformación para el uso del regaliz más allá del ámbito alimentario», sino que también «se convierte en motor de fijación de población e inclusión laboral para mujeres con dificultades de conciliación en el territorio», detallan.

Además, «el cultivo del regaliz de palo es compatible con las crecidas del río, al contrario que muchos otros cultivos que actualmente se están dando en la ribera del Ebro, generando tensiones entre los movimientos naturales del río y la actividad agrícola».

 


 

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